9 al 17 de noviembre de 2024
Dr. J.R. Truan
Noviembre 2024
En esta expedición hemos viajado los traumatólogos Dra. Verónica Fajardo, Dra. Paloma Aragonés, Dra. Mercedes Millan, Dr. Carlos Resines y Dr. Juan R. Truan y la anestesista Dra. Alicia Gutierrez-Jodra. En el último momento se dio de baja la enfermera instrumentista Keren Martín por motivos personales. Viaje realizado vía París sin incidencias.
Esta expedición - la número 94 - ha estado marcada por un acontecimiento catastrófico natural, el derrumbamiento de LA FALAISE DE DSCHANG. (Acantilado de Dschang)
La carretera que une Douala con Dschang, es uno de los ejes más importantes de la red viaria de Camerún. Unos kilómetros antes de llegar a Dschang hay un puerto de montaña con una pendiente media del 7,6%, muchas curvas y una alta densidad de tráfico de turismos , camiones y autobuses. Es un tramo muy peligroso en el que se han producido innumerables accidentes de circulación con víctimas mortales.
La Falaise de Dschang, Camerún
El día 5 de noviembre a las 10 h. de la mañana se produjo un corrimiento de tierras que bloqueó la carretera. Allí acudieron a despejarla unos operarios con sus excavadoras y cuando estaban en pleno trabajo a las 14 h. se produjo un segundo deslizamiento - esta vez mucho mas importante - que se llevó por delante las máquinas y lo que es peor, la vida de los trabajadores y de numerosos personas que fueron enterradas en sus vehículos.
Desde entonces la carretera ha permanecido cortada al tráfico y no se sabe si va a poder ser abierta porque dada su peligrosidad las autoridades están valorando la construcción de una carretera alternativa .
Este hecho ha condicionado la actividad en el hospital porque la región de Sanchou situada antes de la Falaise es una zona muy poblada que por su proximidad al hospital proporciona gran cantidad de pacientes y ahora en vez de recorrer unos 15 Km tienen que dar un rodeo de mas de 150 Km por carreteras infernales.
Este rodeo afectó también nuestro viaje y lo que en principio era un tramo de 50 Km (58 min.) se trasformó en un tramo de 145 Km (3 h 35 min). Por una carretera en muy mal estado.
No importa... seguimos adelante
Pero esto no nos iba a echar atrás y como siempre hicimos la parada habitual en la gasolinera BonJour a la salida de Douala para desayunar y en el mercado de frutas de Njombé, para el avituallamiento de frutas del hospital.
En un puesto del mercado de frutas de Njombé
“Ciencia sin conciencia no es más que la ruina del alma”
Y llegamos, cansados pero llegamos y después de una pequeña siesta comenzamos a trabajar.
Pase de visita para preparar el parte de los quirófanos del lunes . Teníamos dos pacientes para prótesis de cadera, algunas fracturas abiertas para fijadores y algunas cosas más que fueron programadas. Y el lunes después de el rezo en la capilla y la presentación de los miembros de la expedición, comenzamos el trabajo en quirófano y en consultas
Fue en la consulta cuando empezamos a darnos cuenta de la importancia que iba a tener el corte de la carretera en relación a la afluencia de pacientes Hemos visto en la consulta menos de la mitad de los pacientes que habitualmente vemos. Y nos han informado que las numerosas citas previstas del área de Sanchou se han cancelado.
Pero nunca faltan esos pacientes que te sorprenden con sus padecimientos. Aquí tenemos a una simpática mujer de 73 años de edad que consulta por dolores lumbares y que cuando le pedimos que se tumbara en la camilla para explorarla, depositó su mochila en el suelo con esta postura que descartaba cualquier patología grave. Probablemente llevaba toda su vida en esta postura trabajando en el campo.
Todos los días a primera hora pase de visita esta vez con las habitaciones con camas libres por la falta de pacientes pero con casos interesantes y complejos.
Tuvimos tiempo para bajar al pueblo para la obligada visita al mercado de las telas y al mercado de toda clase de cosas, comida, etc. en medio de un caos de circulación de motos y personas y amenizado con estruendosa musica y mésales publicitarios.
Y cenar un pollo asado con patatas fritas y con una terrible salsa picante en un agradable establecimiento sin estrellas Michelin.
Y también tuvimos un rato para llevarles chucherías a los niños de la escuela local y comprobar que el pozo sigue suministrándo agua.
Un gran equipo en esta expedición. Gracias a las chicas y a Carlos por su enorme esfuerzo y por hacer que mi trabajo fuera mucho mas fácil. Grandes compañeras, grandes trabajadoras y grandes profesionales. Un placer haber dirigido esta expedición .
En diciembre vendrá otra expedición para continuar con el trabajo
